Típico. Estas feliz viviendo tu vida cuando de repente ves, oyes o lees algo que hace que tu cabeza se crea más grande que tú.
Así es. A todo el mundo le pasa pero las mujeres somos las reinas del autoboicot. Vivimos 24/7 con nuestra archienemiga en la cabeza. La mayor parte del tiempo nos es super útil, es esencial en nuestro diario vivir pero llega un día en que simplemente decide jugarnos sucio ¡y que bien lo hace!
Así es. A todo el mundo le pasa pero las mujeres somos las reinas del autoboicot. Vivimos 24/7 con nuestra archienemiga en la cabeza. La mayor parte del tiempo nos es super útil, es esencial en nuestro diario vivir pero llega un día en que simplemente decide jugarnos sucio ¡y que bien lo hace!
Puede que yo no sea la persona más indicada para tocar este tema pero ¿que le voy a hacer?
Aveces las mujeres -y algunos hombres- nos enfocamos en buscarle la quinta pata al gato. A nadie le gusta sentir que le han mentido, lo se. Se que sabemos que es verdad pero se nos hace difícil dejarnos regir por ese dicho de que aveces es mejor ignorar la verdad que vivir lamentandola. De vez en cuando se hace necesario aprender a ser estúpidos y filtrar las cosas que almacenamos en nuestra memoria. De nuevo: No soy el mejor ejemplo de lo que predico. Pero de un modo u otro se me da bien dar los consejos que me cuesta poner en práctica.
Al punto que quiero llegar con esto es que la vida no es, no ha sido ni va a ser color de rosa. O como dice mi jefe: No siempre es blanca y negra; A veces es gris. Y es en esos grises donde aprendemos a valorar los tonos rosa. Cuando las cosas no son buenas ni malas, solo diferentes.
Aveces o mejor dicho SIEMPRE las mujeres en general nos dedicamos a preguntar y estar averiguando cosas que no nos importan o puede que si pero el saberlas no nos va a gustar. Hacemos preguntas por intuición, sabiendo que la respuesta nos puede matar o puede ensuciar nuestros mejores recuerdos y aun asi seguimos insistiendo. Sabemos que la respuesta que se nos dé puede mandar a la porra lo que con tanto esfuerzo hemos construido. Pero seguimos insistiendo.
La curiosidad mato al gato y a diario mata a mujeres que nos dedicamos a querer saber más de la cuenta. No todas las verdades son amables al oído. Hay muchas que nos amargan la existencia y es esas las que debemos ignorar. Hay verdades que nos hacen creer que todo lo que hemos oído, sentido o visto son parte de maniobras bien forjadas con sabrá Dios que intenciones. Nos creamos una película con secuelas y todo. Todo gracias a la imaginación.
Muchas veces las mentiras nos hacen reír cuando más lo necesitamos. Y, por cruel que sea algunos cuentos de hadas comienzan con una mentira o como un simple juego. No estoy diciendo que esto sea correcto o no. Tampoco que sea mi caso o el tuyo. Con esto no quiero decir que una debe andar por ahí haciendo y deshaciendo o dejando que hagan lo mismo con una.
Con esto quiero decir que aprendamos a valorar el presente. Que no dejemos que la mente nos mate el corazón. Que dejemos a los muertos descansar, que disfrutemos de los vivos. Que enterremos el pasado o más que enterrarlo que lo quememos y lo tiremos al mar. Así no tendremos sitio específico para ir a llorarlo.
Con esto quiero que entiendas Bonita que nadie te ha mentido o se ha burlado de ti como tu imaginación te grita. Al menos no que yo sepa. No quiero que ahora juegues a ser estúpida, para nada. Lo que quiero que hagas es que abras bien los ojos pero no para estar viendo cosas donde no las hay sino para apreciar el presente y mirar fijo hacia el futuro.
Quiero que abraces y te dejes abrazar. Que ames y te dejes amar. Quiero que sueñes y te despiertes cada mañana a ser la protagonista del cuento que tienes por vida... Vive, Ama y Se Feliz, Bonita.
Aveces las mujeres -y algunos hombres- nos enfocamos en buscarle la quinta pata al gato. A nadie le gusta sentir que le han mentido, lo se. Se que sabemos que es verdad pero se nos hace difícil dejarnos regir por ese dicho de que aveces es mejor ignorar la verdad que vivir lamentandola. De vez en cuando se hace necesario aprender a ser estúpidos y filtrar las cosas que almacenamos en nuestra memoria. De nuevo: No soy el mejor ejemplo de lo que predico. Pero de un modo u otro se me da bien dar los consejos que me cuesta poner en práctica.
Al punto que quiero llegar con esto es que la vida no es, no ha sido ni va a ser color de rosa. O como dice mi jefe: No siempre es blanca y negra; A veces es gris. Y es en esos grises donde aprendemos a valorar los tonos rosa. Cuando las cosas no son buenas ni malas, solo diferentes.
Aveces o mejor dicho SIEMPRE las mujeres en general nos dedicamos a preguntar y estar averiguando cosas que no nos importan o puede que si pero el saberlas no nos va a gustar. Hacemos preguntas por intuición, sabiendo que la respuesta nos puede matar o puede ensuciar nuestros mejores recuerdos y aun asi seguimos insistiendo. Sabemos que la respuesta que se nos dé puede mandar a la porra lo que con tanto esfuerzo hemos construido. Pero seguimos insistiendo.
La curiosidad mato al gato y a diario mata a mujeres que nos dedicamos a querer saber más de la cuenta. No todas las verdades son amables al oído. Hay muchas que nos amargan la existencia y es esas las que debemos ignorar. Hay verdades que nos hacen creer que todo lo que hemos oído, sentido o visto son parte de maniobras bien forjadas con sabrá Dios que intenciones. Nos creamos una película con secuelas y todo. Todo gracias a la imaginación.
Muchas veces las mentiras nos hacen reír cuando más lo necesitamos. Y, por cruel que sea algunos cuentos de hadas comienzan con una mentira o como un simple juego. No estoy diciendo que esto sea correcto o no. Tampoco que sea mi caso o el tuyo. Con esto no quiero decir que una debe andar por ahí haciendo y deshaciendo o dejando que hagan lo mismo con una.
Con esto quiero decir que aprendamos a valorar el presente. Que no dejemos que la mente nos mate el corazón. Que dejemos a los muertos descansar, que disfrutemos de los vivos. Que enterremos el pasado o más que enterrarlo que lo quememos y lo tiremos al mar. Así no tendremos sitio específico para ir a llorarlo.
Con esto quiero que entiendas Bonita que nadie te ha mentido o se ha burlado de ti como tu imaginación te grita. Al menos no que yo sepa. No quiero que ahora juegues a ser estúpida, para nada. Lo que quiero que hagas es que abras bien los ojos pero no para estar viendo cosas donde no las hay sino para apreciar el presente y mirar fijo hacia el futuro.
Quiero que abraces y te dejes abrazar. Que ames y te dejes amar. Quiero que sueñes y te despiertes cada mañana a ser la protagonista del cuento que tienes por vida... Vive, Ama y Se Feliz, Bonita.