Dijeron las palabras exactas, en el tono correcto y las complementaron con eso que llaman un lenguaje corporal acertado. Supieron además, jugar con las miradas y uno que otro roce.
Al principio no me lo creía. Estaba loca por despertar del que según yo era un sueño; de varios días pero sueño al fin.
Al principio no me lo creía. Estaba loca por despertar del que según yo era un sueño; de varios días pero sueño al fin.
Pero no lo era, era real, tan real que hasta incomodaba. Creo que lo más incómodo de la situación era el hecho de que, en las últimas semanas, ese tipo de conversaciones habían sido mi dolor de cabeza. Ahí estaban ellos, diciendo las cosas que previamente había escrito en mi guión, todo al pie de la letra. En ocasiones superaron las expectativas gracias a su originalidad, pero nada causaba el efecto debido. Y es que hasta lo bueno y deseado cansa. Para bien o para mal.
Como decía, era confuso. Es como que un día te despiertas y ves que la película de tu vida está en todas las carteleras de cine. Te llenas de emoción y te sientes feliz de verlo por fin hecho realidad. Luego, cuando se te pasa la fiebre del momento te das cuenta de que, a pesar de ser TU película, ver el personaje no te provoca ese cosquilleo. No es un asunto de físico ni mucho menos, es simplemente que al soñar la película te llenabas de emoción de solo ver al personaje principal. Te imaginabas la forma en que tus rodillas flaquearían ante su presencia y la luz que invadiría tu rostro. En resumen el cuerpo te indicaría que ese era. Si, si, si como les pasa a las quinceañeas.
A todo esto se le suma el hecho de que para tu "personaje principal" te habías planteado cierto perfil a cumplir. Si la persona en cuestión cumplía con las expectativas importaba muy poco el guión. Lo importante es que mantuviera la esencia.
En medio de la mezcla entre wow y wow me pregunto si seré muy exigente. Me pregunto también si merezco lo que quiero, si hago algo para conseguirlo. Me pregunto de qué es que me las doy.
Además de esto, también me pregunto en que piensan ellos. ¿Qué tienen en la cabeza?, ¿Qué es lo que les hace pensar que la sinceridad va a suavizar el hecho de que sean unos ingratos inconformes que no saben valorar lo que tienen y andan por ahí en búsqueda de algún "complemento extra"? ¿Que ya eso del respeto pasó de moda? ¿En qué momento se confundió el ser open-minded con ser fácil o desesperada?
Y a todo esto, ¿Cuál es la necesidad de estar en una relación con alguien que no te satisface por así decirlo?
Espero que esto responda los por qués de las personas a quién hoy escribo. A ustedes les digo: Gracias por alimentarme el ego, gracias por las palabras bonitas, los detalles, atenciones y demás. Pero lamentablemente no cumplen con el perfil.
Y puede que nunca llegue quien cumpla con el perfil pero, al menos, espero cumpla con el requisito primordial: disponibilidad. Porque creeré mucho en la química y eso pero el respeto siempre será determinante.
Como decía, era confuso. Es como que un día te despiertas y ves que la película de tu vida está en todas las carteleras de cine. Te llenas de emoción y te sientes feliz de verlo por fin hecho realidad. Luego, cuando se te pasa la fiebre del momento te das cuenta de que, a pesar de ser TU película, ver el personaje no te provoca ese cosquilleo. No es un asunto de físico ni mucho menos, es simplemente que al soñar la película te llenabas de emoción de solo ver al personaje principal. Te imaginabas la forma en que tus rodillas flaquearían ante su presencia y la luz que invadiría tu rostro. En resumen el cuerpo te indicaría que ese era. Si, si, si como les pasa a las quinceañeas.
A todo esto se le suma el hecho de que para tu "personaje principal" te habías planteado cierto perfil a cumplir. Si la persona en cuestión cumplía con las expectativas importaba muy poco el guión. Lo importante es que mantuviera la esencia.
En medio de la mezcla entre wow y wow me pregunto si seré muy exigente. Me pregunto también si merezco lo que quiero, si hago algo para conseguirlo. Me pregunto de qué es que me las doy.
Además de esto, también me pregunto en que piensan ellos. ¿Qué tienen en la cabeza?, ¿Qué es lo que les hace pensar que la sinceridad va a suavizar el hecho de que sean unos ingratos inconformes que no saben valorar lo que tienen y andan por ahí en búsqueda de algún "complemento extra"? ¿Que ya eso del respeto pasó de moda? ¿En qué momento se confundió el ser open-minded con ser fácil o desesperada?
Y a todo esto, ¿Cuál es la necesidad de estar en una relación con alguien que no te satisface por así decirlo?
Espero que esto responda los por qués de las personas a quién hoy escribo. A ustedes les digo: Gracias por alimentarme el ego, gracias por las palabras bonitas, los detalles, atenciones y demás. Pero lamentablemente no cumplen con el perfil.
Y puede que nunca llegue quien cumpla con el perfil pero, al menos, espero cumpla con el requisito primordial: disponibilidad. Porque creeré mucho en la química y eso pero el respeto siempre será determinante.